Warning: Undefined array key "banner_ad_width" in /home/recorri/public_html/wp-content/plugins/quick-adsense-reloaded/includes/render-ad-functions.php on line 359
Warning: Undefined array key "banner_ad_height" in /home/recorri/public_html/wp-content/plugins/quick-adsense-reloaded/includes/render-ad-functions.php on line 360
(entrevista P. Camarena, postulador)
El padre José Camarena, actual postulador de la causa de canonización del sacerdote jesuita, asegura que existen testimonios de incontables milagros del orden moral, esto es, que han servido para la transformación de la vida en la gente, pero la Santa Sede requiere de un milagro de orden físico, que no haya duda de la intervención divina en él, y que pueda ser catalogado como la firma plausible de Dios que verifique la santidad de la persona.
Incluso se habla de un milagro absolutamente documentado, certificado por tres médicos, a propósito de una intervención divina en Torreón, Coahuila. El expediente se envió a Roma en una valija diplomática, a través del Delegado Apostólico en México, pero la documentación jamás llegó a las oficinas vaticanas. Al paso de los años, cuando el mismo expediente se decidió enviar a la Santa Sede, uno de los médicos que habían avalado el presunto milagro se retractó, de modo que se tuvo que empezar de cero.
El postulador de la causa de canonización (para declarar santo al Padre Pro) explica que a pesar de los incontables milagros morales, la gente debe hacerle llegar su testimonio de un milagro pesable, medible, cuantificable, físico en pocas palabras, para elaborar un estudio serio y profundo de la intervención divina en un hecho particular.
La intercesión del padre Pro no está en duda, anualmente, la Parroquia de la Sagrada Familia en la colonia Roma recibe más de 30 peregrinaciones provenientes de México, Estados Unidos, Canadá, Japón, Turquía, Centroamérica, Sudamérica, China y Sudáfrica. Asisten infinidad de fieles devotos al mexicano mártir por considerarlo gran intercesor, pero como lo han dicho los diversos postuladores de la causa del padre Pro: sólo hace falta el milagro.