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Templo y exconvento de San Francisco.
Obra conventual del siglo XVI, concebida por la orden franciscana.
El templo es uno de los mas espectaculares en su género; y como todos, da la apariencia de una alta e impresionante fortaleza.
La fachada principal es de bastante sencillez; presenta restos de pinturas florales en color rojo y una placa alusiva a su construcción.
La portada presenta un panel rectangular que enmarca al vano de entrada, cuyo arco y jambas son de estilo medieval.
Muestra como única decoración, pequeñas pomas que subrayan la silueta del vano.
La ventana coral tiene arco escarzano, también decorado con pomas, y al parecer se halla modificada. Arriba se encuentra otra pequeña ventana, y por ultimo, la portada remata con una banda de almenas a manera de saeteras.
La portada esta reforzada en sus extremos por grandes contrafuertes en posición diagonal; uno de ellos lleva en su interior una escalera de caracol que conduce hasta el campanario que remata con capitel.
Las fachadas laterales sobresalen por sus contrafuertes, rematados por garitones que se combinan con las almenas en banda continua, alrededor del templo.
Se aprecian además pasillos en tres niveles escalonados, que permitían la circulación por el exterior del templo, a manera de los pasos de ronda medievales.
El interior es de una sola nave, cubierta con bóveda de nervaduras góticas, cuyas tracerías forman estrellas de diferentes diseños, estacando la del presbiterio, por ser mas compleja.
En los muros de la nave se localizan en total veinte ventanas dispuestas en dos niveles; estas bañan de luz difusa al interior.
Destaca un retablo muy original pintado al fresco, que en su diseño incluye pasajes de San Francisco de Asís; existe otro de madera dorada con estilo barroco, y el principal, de estilo neoclásico, tiene un ciprés.
El convento, propiamente dicho, se conserva parcialmente; destaca el claustro con galerías de arcos escarzanos en sus dos niveles.
En el exterior se observa una sencilla portería cuyo arco de entrada tiene rosetas y rodelas en relieve, poco perceptibles.
El portal sirve de vestíbulo a la capilla de la Tercera Orden, en cuya fachada muestra un bello trabajo barroco de argamasa fechado en 1721.
En el interior destaca un ciprés neoclásico y pinturas dimensiónales que decoran los muros.
Parroquia del Niño Doctor.
Su fachada principal tiene características barrocas y esta constituida por una portada de tres accesos y torre con campanario.
La portada presenta, en cada uno de los accesos, vano con arco de medio punto, flanqueados por columnas jónicas que soportan un grueso entablamento con friso fitomorfo; los laterales rematan con frontón roleado, coronado por grandes escudos; el acceso central continua con la ventana coral adintelada, acompañada de pilastras, entablamento y remate con perillones; a sus lados se encuentran grandes copas con pináculos.
La composición de cada uno de los accesos esta contenida en un gran arco ciego con motivos vegetales.
Remata la portada un balaustrado y frontón mixtilíneo al centro.
El campanario ostenta vanos con arco de medio punto, columnas salomónicas, pináculos y cupulín con linternilla.
El interior tiene planta basilical, y su cubierta alterna bóvedas de lunetos, de arista, y cúpula gallonada sobre pechinas.
Destaca en el presbiterio el magnifico retablo principal de estilo neoclásico, dedicado al Señor de las Maravillas.
Cuenta además con bellas capillas laterales con retablos neoclásicos.
El Rollo de Tepeaca.
Se encuentra en el centro de la plaza principal y es uno de los monumentos más sobresalientes del arte mudejar, realizado en México durante el siglo XVI.
Su ejecución se asigna a fray Sebastián de Trasierra, quien inició la construcción en 1559. Según se dice, este edificio tuvo desde sus inicios el carácter de picota, lugar donde se castigaba fuertemente a los indios.
En el siglo XIX, su imagen fue cambiada al instalarse un bello reloj publico.
Es una alta torre de planta octagonal, desplantada al centra de un basamento con escalinatas, donde se localizan grotescas esculturas de felinos emplumados en posición sedente.
Presenta en su primer cuerpo una pequeña portada con vano de acceso, pilastras, remate ojival y relieves de águilas aztecas; en los demás lados se hallan colocados los antiguos grilletes, que recuerdan su función de picota.
En el segundo cuerpo se disponen ventanas en ajimez, cabezas felinas, gárgolas y pináculos.
El remate lo constituye un reloj de cuatro caras, alojado en un cuerpo prismático con arcos de medio punto.
Casa de Hernán Cortés.
Se localiza frente a la plaza principal, en su esquina noroeste.
Aunque se encuentra deteriorada es bastante interesante en el aspecto histórico, debido a que fue aquí donde Hernán Cortés firmo el 30 de octubre de 1520, la segunda de sus cinco cartas de relación; en ella solicitaba a! emperador Carlos V que el territorio conquistado fuera llamado de la Nueva España.
Fiesta de San Francisco de Asís.
Fiesta patronal que se efectúa del 2 al 8 de octubre, aunada a la Feria de Tepeaca.
Entre las actividades del programa se incluyen mañanitas, misas, procesiones, peregrinaciones, elección de reina de la feria, exposición artesanal, agrícola y, ganadera, peleas de gallos, carreras de caballos, presentación de artistas
nacionales, coros, cuartetos de cuerda, grupos folclóricos, fuegos artificiales, eventos deportivos, bailes populares, juegos mecánicos y antojitos regionales.
Se expenden artículos de ónix, principalmente de tipo decorativo: juegos de ajedrez y domino, candelabros, mesas de centro, ceniceros, servilleteros, timbres, separadores y alhajeros, entre otros.
Cantera negra: metates y molcajetes, así como una gran variedad de figuras de animales.
Maria Isabel.
Forma parte de las instalaciones del hotel que lleva el mismo nombre y cuenta con dos albercas y tres chapoteaderos de agua cristalina; además amplias áreas verdes, restaurante, estacionamiento, canchas de básquetbol, tenis, fútbol, badmington y ping pong. Esta abierto al público los sábados y domingos de 10:00 a 16:00 horas.
